Ya sea por razones higiénicas o cosméticas, el paciente que está cansado de métodos temporales y a menudo dolorosos para eliminar el vello no deseado puede recibir alivio con láser y con luz de pulso intenso. La depilación láser es ideal para el cabello afroamericano debido a que el láser se enfoca en el cabello más oscuro y grueso.
Los láseres producen haces de luz muy concentrados e intensos que son absorbidos por pigmentos oscuros en los folículos pilosos debajo de la superficie de la piel y se convierten en calor, destruyendo los folículos y evitando el crecimiento del cabello hasta por dos años. Se requieren múltiples tratamientos para la eliminación completa del vello: el folículo debe estar activo en el momento del tratamiento y no todos los folículos están activos al mismo tiempo. Estos tratamientos no requieren agujas ni tampoco anestesia. La mayoría de los pacientes sienten nada más que un ligero pinchazo como el golpe de una banda elástica.